sábado, 20 de junio de 2015

10. ¿SI LOS DIEZ MANDAMIENTOS YA NO ESTÁN EN VIGOR ES LICITO HACER TODO LO QUE ELLOS PROHIBÍAN?

10.    ¿SI LOS DIEZ MANDAMIENTOS YA NO ESTÁN EN VIGOR ES LICITO HACER TODO  LO QUE ELLOS PROHIBÍAN?


Y si buscando ser justificados en Cristo Jesús también nosotros somos hallados pecadores, ¿Es por eso Cristo ministro de pecado? En ninguna manera. Gálatas 2:17
Al oír que afirmamos que los diez mandamientos también fueron clavados en la cruz, quienes abogan por su permanente vigor preguntan; ¿entonces ahora podemos matar, robar, adulterar, etc.? Al fin y al cabo ya no hay ley que nos lo prohíba, quizás por eso el apóstol Pablo escribió lo ya mencionado en Gálatas 2:17. La razón de tal afirmación es que no conceden otra manera de ser guiados en la senda de la santidad sino solo a través de ordenanzas y mandatos escritos con letras ya sea en las tablas de piedra o en hojas de papel, pero el profeta Jeremías hablando del nuevo pacto dice lo siguiente: Daré mi ley en su mente y lo escribiré en su corazón… Jeremías 31:33. Hebreos 10:16.
Es importante comprender que bajo el nuevo pacto el Espíritu Santo es el protagonista principal en guiar a los creyentes pues el señor Jesús así lo dijo: Y yo rogare al Padre, y os dará otro Consolador para que esté con vosotros para siempre.
En el memorable día del pentecostés el Espíritu Santo descendió y se quedó con los creyentes hasta el día glorioso de la redención. Hechos 2:4,33. Efesios 4:30.
Las Sagradas Escrituras nos dice claramente, nos dice que el creyente es el templo del espíritu Santo. 1 corintios 3:16,17.
Es por eso que aunque nuestra naturaleza humana tiende a revelarse, el Espíritu que el Señor ha derramado en nuestro corazón nos guía y nos ayuda a vivir una vida agradable a nuestro Padre celestial. Veamos lo que dice romanos 8:1. Ahora pues ninguna condenación hay para  los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne sino conforme al Espíritu. Además el verso 9 dice lo siguiente: más vosotros no vivís según la carne sino según el Espíritu, si es que el Espíritu de Dios mora en vosotros. Y si alguno no tiene el Espíritu de Cristo no es de él. Romanos 8:9.
En su carta a los Gálatas el mismo apóstol pablo aconseja lo siguiente: digo pues andad en el espíritu y no satisfagáis los deseos de la carne, porque el deseo de la carne es contra el Espíritu, y el del espíritu es contra la carne. Y estos se oponen entre sí, para no que no hagáis lo que quisiereis, pero si sois guiados por el Espíritu, no estáis bajo la ley. Gálatas 5:16-18.
Es muy importante saber que la mejor manera de interpretar las escrituras es por medio de las mismas Sagradas escrituras de otra manera se puede sacar un texto de su contexto y formar así un pretexto para decir lo que en ella no dice. Tomando en cuenta este detalle analizaremos algo muy importante en Éxodo 31:18. Nos dice que las dos tablas de piedra fueron escritas con el dedo de Dios.
En el evangelio según San Lucas el Señor Jesús dice: Mas si por el dedo de Dios hecho yo fuera los demonios, ciertamente el reino de Dios ha llegado a vosotros. Lucas 11:20.
El evangelista Mateo refiriéndose al mismo caso dice lo siguiente: pero si yo por el Espíritu de Dios hecho fuera los demonios, ciertamente ha llegado a vosotros el reino de Dios. Mateo 12:28.
Así que con base al texto de San Lucas y su contexto en San Mateo Las Escrituras nos enseñan que el dedo de Dios es el ESPIRITU SANTO.
Por lo tanto, si el Espíritu Santo pudo escribir en las dos tablas de piedra los diez mandamientos de Dios para el pueblo de Israel, también puede escribirlo en la mente y en los corazones de los creyentes los designios de la voluntad de Dios.
Y esto es precisamente lo que hace en el verdadero creyente, veamos lo que dice el apóstol Pablo en su carta a los Gálatas: Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, etc. Gálatas 5:22-23. El primer fruto mencionado es el amor y en su carta a los romanos el mismo apóstol afirma que el amor no hace mal al prójimo; así que el cumplimiento de la ley es el amor. Romanos 13:10. Y en su primera carta a los corintios nuevamente aclara lo que es el amor y también lo que no hace, pues dice lo siguiente: El amor es sufrido, es benigno… el amor no hace nada indebido, no busca lo suyo… no se goza de la injusticia… 1 corintios 13:4, 5,6.
Por lo tanto el verdadero creyente lleno del Espíritu Santo no actúa conforme a la carne pues lo que impulsa al robo, al adulterio, al homicidio y a otras cosas semejantes no solo reprobadas por el señor sino también por la sociedad es el deseo de satisfacer los impulsos de la carne, pero el creyente lleno del Espíritu Santo tiene el amor de Dios derramado en su corazón y por lo tanto no puede pecar porque es nacido de Dios. Romanos 5:5. 1 Juan 3:9.



CONCLUSIÓN

Así que concluimos que aunque no estamos bajo el régimen de los diez mandamientos no por eso se nos es permitido pecar, sino que el Espíritu Santo morando en nuestro corazón nos guarda de pecar, pues los que son del Espíritu piensan en las cosas del Espíritu. Romanos 8:5.
Como aclaración final deseo dejar muy bien definido que el enfoque del presente estudio es exponer de la mejor manera y con bases bíblicas totalmente sólidas que los diez mandamientos no nacieron en el huerto del Edén sino que fueron dados por el Señor al pueblo de Dios en el monte Sinaí cuando salieron de la esclavitud de Egipto. Y como claramente se puede comprobar a los que defienden el concepto de que los mismos no fueron clavados en la cruz, sino que los mandamientos que caducaron en la cruz fue solamente lo que ellos llamaban ley de Moisés.
He mostrado con base en Las Sagradas Escrituras que no hay tal separación sino que la ley es una llamado alternativamente en ocasiones algún mandamiento de los diez como ley de Moisés y en ocasiones a los que estaba escrito en el libro como Ley de Dios. Marcos 7:10. Nehemías 8:1,8. Josué 24:26.
Y si lo que caducó según los que defienden la perpetuidad de los diez mandamientos es sólo lo que estaba escrito en el  libro que ellos llaman Ley de Moisés, entonces para que me ocupo de comentar sobre  la ley de alimentación, de lo limpio o de lo inmundo ya que desde luego es como eso estaba escrito en el libro, por lógica no está en vigor para la dispensación de la gracia.

Esperando que el “estudio” sea de bendición para la obra, reciban un cordial saludo de su hermano Pablo Ixtepan Cortes, y que la gracia de nuestro Señor y Salvador Jesucristo sea con cada uno de vosotros, Amén.


“EL EVANGELIO PURO DE LA GRACIA DE DIOS”





AGRADECIMIENTOS
A:
Mayra Alvarado

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